Vicepresidenta electa de Guatemala: “El gran reto es que a través del diálogo se pueda sensibilizar a la oposición”

CIUDAD DE GUATEMALA / WASHINGTON — El pasado 20 de agosto, los guatemaltecos escogieron a Bernardo Arévalo como su próximo presidente, y con él, pusieron por segunda vez en la posición de vicepresidenta a una mujer: Karin Herrera.

La elección del binomio presidencial ocurrió en un momento tumultuoso entre órdenes de inhabilitación del movimiento Semilla, que representa a Arévalo y Herrera, amenazas a la seguridad de los ganadores y denuncias de fraude desde la oposición.

Pasadas las controversias, los equipos del presidente electo y del actual mandatario, Alejandro Giammattei, comenzaron el proceso de transición de gobierno de cara al 14 de enero, cuando Arévalo y Herrera asumirán sus posiciones.

Antes de Herrera, la única vicepresidenta que había tenido Guatemala fue Roxana Baldetti, quien asumió el cargo en enero de 2012. Sin embargo, tres años después se enfrentó a un escándalo por fraude fiscal y renunció a su puesto. En el mismo suceso estuvo involucrado el entonces presidente Otto Pérez Molina. Ambos fueron encarcelados en 2015 y en 2022, fueron condenados a 16 años de prisión.

La Voz de América habló con Herrera sobre su histórica elección, los planes de gobierno y el futuro.

Esta entrevista ha sido editada por propósitos de calidad.

VOA: ¿Cómo ha vivido la experiencia de llegar a la vicepresidencia?

Herrera: Desde la primera vuelta, con el resultado que tuvimos, fue [la confirmación de] lo que intuíamos en las calles pero no en las encuestas. En la segunda vuelta, llena de contratiempos, desde el 26 [de julio] mucha desinformación… esto parece una carrera de obstáculos. Espero que finalmente las personas que están ejerciendo el poder comprendan que es el pueblo el que está solicitando un cambio de rumbo y que nosotros estamos dispuestos a trabajar por eso que quiere le pueblo.

VOA: El movimiento Semilla está afrontando ciertos frentes contrarios. ¿Cómo están afrontando la situación?

Herrera: Ha sido una etapa en la que hemos sido bastante resilientes… El amedrentar, desesperar e impedir que se cumpla este sueño que tiene la población, esta esperanza que tiene la población, este anhelo que tiene porque es un pequeño grupo que quiere seguir con los privilegios y es algo que la población ya no quiere. La población quiere que el dinero público se utilice para lo que se tiene que utilizar.

Ha sido un proceso bastante complejo el perder privacidad, porque ahora ya tiene uno un gran círculo de seguridad, el tener esa incertidumbre de [si] será posible que se llegue a esos extremos de atentar contra la vida de uno… Yo pienso que toda persona electa para el siguiente periodo y los que actualmente están por ejemplo en el Congreso o en el Ejecutivo, tienen la posibilidad en este momento de decidir. A partir de hoy voy a trabajar por el pueblo y mis intereses personales van a quedar en un baúl guardados. Es cuestión de decisión.

VOA: ¿Cómo será su apoyo como vicepresidenta al lado del presidente electo?

Herrera: El gran compromiso porque materialicemos ese plan de gobierno, ese plan de gobierno que es pequeñito con relación a todo el abandono que hay en todo el país. Pero es un plan de gobierno que tiende la mano a aquellos que han estado abandonados, olvidados, excluidos por años y décadas.

Se dice que queremos que todos sean millonarios en Guatemala, no [es así], pero sí que vivan en condiciones dignas. ¿Por qué un niño en desnutrición tiene que vivir en la calle? ¿Por qué un niño con desnutrición no puede tener su casita? ¿Por qué no puede tener agua apta para consumo humano? La debe tener. Estas eran Speaker2: etas que debieron cumplirse en el año 2000, eran los Objetivos del Milenio y han pasado 23 años y sigue una brecha pendiente.

VOA: ¿Cómo evalúa la participación de la mujer en la política y cómo espera que cambie con su llegada al Ejecutivo?

Herrera: Tenemos varias representantes y siempre he dicho que uno tiene la oportunidad de dar lo mejor que pueda, y ese legado puede ser de mucha honra o de mucha deshonra. Creo que no depende de si uno es hombre o mujer, porque al final es la persona. Pero nosotras tenemos un doble compromiso porque cada una de nosotras representa a muchas mujeres que no están en nuestro lugar. La mayoría de la población en Guatemala somos mujeres.

Con nosotras es una gran lupa, un pequeño error es visto así porque somos menos y es más fácil monitorearnos. Eso no quiere decir que tengamos excusa para hacer las cosas mal. Así que quienes nos han representado y son mujeres es posible reencauzar el camino.

VOA: Usted será la segunda mujer en llegar a la vicepresidencia de Guatemala, ¿por qué cree que el antecedente de la exvicepresidenta Roxana Baldetti, le deja un reto aún mayor?

Herrera: Porque solo hemos tenido una vicepresidenta y la lupa es así [muy grande]. Hemos tenido vicepresidentes, varios presidente que han sido hombres y también han cometido sus errores, pero es más fácil solo ver cuando solo ha sido una persona. Eso no justifica lo que sucedió, pero sé que nosotras tenemos que estar conscientes del papel que tenemos que ejercer.

VOA: ¿Cuál es el plan que tiene para fortalecer la protección a la mujer y la igualdad de género?

Herrera: A través de la Secretaría contra la Violencia Sexual, Explotación y Trata de Personas pensamos trabajar un plan para fortalecer estas medidas de seguridad pero este plan no puede ser solitario. Necesitamos de la participación y el apoyo del sistema del Organismo Judicial… a través del Congreso hay muchas posibilidades a través de iniciativas de ley que están ahí engavetadas y que solo necesitan la voluntad política de estos políticos que nos dijeron que querían trabajar por nosotros para avanzar en esos temas.

VOA: ¿Cuál será el reto principal al llegar a la vicepresidencia?

Herrera: Mi principal reto es lograr servir y que esto que está plasmado en el plan de gobierno se empiece a sentir en la población. Que no tengo una varita mágica… yo sé que hay muchos actores que se van a oponer al trabajo de este binomio y ya lo estamos sintiendo y sé que va a ser más fuerte. Y el gran reto es que a través de este diálogo nacional que se pretende establecer, se pueda sensibilizar a algunos de estos opositores.

VOA: ¿Tiene temor por su vida?

Herrera: Mucho temor. Trato de no, de no instalarlo en mi vida, pero sé que la posibilidad existe porque parecen estas personas muy desesperadas y lo estamos viendo con todas estas medidas ilegales a las que se les está dando trámite. Y esto muestra desesperación porque ya no se respeta la ley.