Un recorrido histórico que demuestra el comportamiento del voto municipal en la segunda vuelta electoral, desde los comicios de 2011 hasta los de 2019.
Texto: Phauly Tzoc, Catarina Huix, Lenad Gamboa, Juan Diego Godoy / Edición: Juan Diego Godoy, Carolina Gamazo / Ilustraciones: Diego Orellana
Cada cuatro años, las elecciones generales en Guatemala se convierten en una montaña rusa en la que los 340 municipios de los 22 departamentos del país deciden votar por el candidato afín a sus intereses. Si bien el voto es más emocional que racional, también es cierto que sigue ciertos parámetros de comportamiento.
Por ejemplo, existen municipios en nuestro país que han votado, por lo menos desde 2011, por una misma opción y oferta electoral, y departamentos enteros que suelen ser predictores de presidentes y que no han fallado en los últimos tres balotajes. Pero hay otros territorios que suelen ser más versátiles. Así como pueden elegir a un candidato de cierta tendencia e ideología en unos comicios, luego, cuatro años después, pueden inclinarse completamente por un candidato que represente todo lo contrario. Y esos municipios versátiles son mayoría. Quizás porque el votante promedio de Guatemala es así; impredecible.
Desde No Ficción, en colaboración con el equipo de La Urna Departamental, hemos hecho una investigación para analizar el modus operandi del voto durante la segunda vuelta electoral de los últimos tres comicios (2011, 2015 y 2019), con el fin de identificar tendencias y actitudes de los votantes en los 22 departamentos del país, de cara al balotaje del 20 de agosto de 2023, donde disputarán la presidencia Bernardo Arévalo, del partido Movimiento Semilla y, por tercera vez consecutiva, Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE).
Para efectos prácticos y de cobertura geográfica, hemos dividido el mapa del país en tres regiones. La región occidental comprende los departamentos de Huehuetenango, Quiché, Totonicapán, San Marcos, Sololá, Suchitepéquez y Retalhuleu. En cambio, la región metropolitana o central, incluye los departamentos de: Petén, Alta Verapaz, Baja Verapaz, Chimaltenango, Guatemala, Quetzaltenango, Sacatepéquez y Escuintla. Finalmente, la región oriental está conformada por los departamentos de Izabal, Zacapa, El Progreso, Chiquimula, Jalapa, Jutiapa y Santa Rosa.
Capítulo 1: Región Central
Catarina Huix / Quetzaltenango Juan Diego Godoy / Ciudad de Guatemala
¿Cómo votamos? Las respuestas a esta pregunta varían con los años, por el contexto en el que se llevan a cabo las elecciones. En 2011, por ejemplo, el país culminaba un gobierno socialdemócrata abanderado por la UNE de Álvaro Colom y veía el surgimiento de Sandra Torres. Esta se convertiría, en los siguientes años, en la dueña del partido más exitoso de la historia democrática guatemalteca y en la política más popular del país.
Sin embargo, un impedimento constitucional impidió la participación de Sandra Torres y del Partido Une lo que fortalecería la imagen de otra figura petenera: la de Manuel Baldizón, del partido Líder. Así, la segunda vuelta se disputó entre el extinto Partido Patriota y el Partido LIDER.
Finalmente, el candidato del extinto Partido Patriota, Otto Pérez Molina, se hizo con la presidencia con el respaldo de Quetzaltenango, Guatemala, Sacatepéquez, Baja Verapaz y Chimaltenango. Como puede verse en los siguientes mapas, los departamentos más cercanos a la capital votaron en su mayoría por el Partido Patriota.
En Chimaltenango y en Baja Verapaz, de la misma forma, el resultado fue favorable a Otto Pérez Molina. Aunque en Chimaltenango, cinco municipios tuvieron mayoría de votos para Manuel Baldizón.
En Quetzaltenango, en las elecciones de 2011 el partido Líder y el Partido Patriota lograron el apoyo en el mismo número de municipios, pero el PP obtuvo mayoría en los municipios más poblados.
El voto de la región central apoyaba al militar, mientras que departamentos como Petén, Escuintla y Alta Verapaz (tradicionalmente aliados a la UNE) se pintaron de rojo por Baldizón.
Escuintla fue el departamento donde más apoyo tuvo Manuel Baldizón en 2011. En este departamento, todos los municipios menos Guanagazapa votaron en su mayoría por el partido Líder.
Durante el 2015, sin embargo, el contexto era otro. Las protestas masivas de 2015 que llevaron a la dimisión del binomio patriota y los constantes casos de corrupción que divulgaba la también extinta Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y el Ministerio Público que lideraba en aquel entonces la fiscal general Thelma Aldana, hicieron de la lucha contra la corrupción una consigna electoral.
La campaña del “No Te Toca” se cobró la candidatura Manuel Baldizón, que se sintió presidente por una interpretación descontextualizada del comportamiento ciudadano en las elecciones presidencialistas, que solía elegir al candidato que ocupaba el segundo puesto en los comicios anteriores. El 2015 lo cambió todo.
La segunda vuelta fue disputada por Sandra Torres (UNE), quien participaría por primera vez en la contienda electoral y en un balotaje de segunda vuelta, y Jimmy Morales (FCN Nación), el candidato sorpresa y outsider. Quetzaltenango, Petén, Baja Verapaz, y Guatemala emitieron su voto por Jimmy Morales (FCN NACIÓN) y con ello, Morales ganó en esta región.
El mapeo muestra el “no” rotundo de estos departamentos hacia la UNE de Sandra Torres.
Un nuevo capítulo electoral, llegaría después de 4 años, con la segunda participación de Sandra Torres, pero esta vez contra otro candidato que no era sorpresa y que tampoco era outsider: Alejandro Giammattei (VAMOS), el eterno candidato presidencial.
Esta vez, los mismos departamentos que votaron a Morales, respaldaron a Giammattei; Quetzaltenango, Guatemala, Sacatepéquez, Chimaltenango y Baja Verapaz.
En Quetzaltenango varios municipios que votaron por Jimmy Morales en 2015, optaron por apoyar a Sandra Torres en segunda vuelta en 2019.
La victoria no fue para la UNE, pero la carrera política de Sandra Torres despertó nuevos simpatizantes en Petén y Escuintla, y la siempre fiel Alta Verapaz.
En resumen, los departamentos de la región central que desde el 2011 han apoyado a la UNE o a una opción que se le parezca (como lo fue Líder en 2011), son Petén, Escuintla y Alta Verapaz.
Capítulo 2: Región Occidental
Phauly Tzoc / Totonicapán
Juan Diego Godoy / Ciudad de Guatemala
En las elecciones de 2011, en donde disputaron la segunda vuelta presidencial los candidatos Manuel Baldizón (Líder) y Otto Pérez Molina (Partido Patriota) los siete departamentos de la región analizada votaron a favor de Manuel Baldizón, sin excepción alguna, pocos fueron los municipios que votaron por Pérez Molina.
En la Costa Sur occidental al apoyo a Manuel Baldizón fue masivo en la segunda vuelta de las elecciones generales de 2011. Así lo evidencian el voto por municipio en Retalhuleu y Suchitepéquez.
El departamento de Totonicapán también se volcó casi por completo a apoyar a Manuel Baldizón en las elecciones de 2011.
Después de estas elecciones, a esta región se agregaron dos municipios: en San Marcos, el territorio de La Blanca, que era parte de Ocós, se convirtió en el municipio número 30 del departamento, y en Suchitepéquez, se aprobó la creación del municipio número 21 llamado San José la Máquina. Ambos fueron aprobados en 2014 y en las elecciones de 2015 ya fueron incluidos, caso contrario a lo sucedido en Huehuetenango; el municipio número 33 llamado Petatán también obtuvo su aprobación en 2014 pero no fue hasta en 2019 que participó en unas elecciones generales.
En los comicios de 2015, para el balotaje entre Jimmy Morales (FCN- Nación) y Sandra Torres (UNE), el comediante obtuvo el voto de seis de los siete departamentos que conforman esta región y solamente Quiché estuvo a favor de la UNE con 124336 votos. A diferencia de 2011, en un 2015 que fue víctima del contexto político caótico que hemos explicado en el capítulo 1, el voto migró a la opción novedosa que prometía acabar con el tema de moda de aquel entonces, la corrupción, y que fue la consigna de campaña del candidato Morales.
En las elecciones de 2019, con Sandra Torres (UNE) nuevamente al balotaje de segunda vuelta y esta vez contra Alejandro Giammattei (Vamos), la tendencia regresó a parecerse a la de 2011.
Torres ganó las elecciones en dos departamentos: Quiché y Huehuetenango. Cabe resaltar que si bien los demás departamentos eligieron a Giammattei, en muchos municipios los votos estuvieron muy divididos, con muy poca diferencia porcentual como en el departamento de San Marcos, donde la diferencia entre ambos en 2019 fue muy leve. Las cifras a favor de Torres aumentaron considerablemente entre 2015 y 2019.
Quiché es uno de los departamentos con mayor apoyo a Sandra Torres. Tanto en 2015 como en 2019, la candidata del partido UNE ha logrado ganar en la mayoría de municipios de este departamento.
En los departamentos de la Costa Sur Occidental, Retalhuleu y Suchitepéquez se dio el fenómeno de mostrar un apoyo masivo a Jimmy Morales en las elecciones de 2015, en los que ningún municipio, a excepción de Zunilito, votó por Sandra Torres en su primera campaña presidencial. Sin embargo, en la campaña de 2019, el apoyo a Torres fue considerable en ambos departamentos en los que Torres obtuvo casi un empate con Giammattei.
Sololá y Totonicapán, a diferencia de los departamentos de occidente, Sandra Torres no ha obtenido tan buenos resultados en ninguna de las dos últimas contiendas electorales. En Totonicapán, los municipios que han votado por Torres han sido Santa Lucía la Reforma y Santa María Chiquimulilla, son también los dos municipios más pobres del departamento. En Sololá, si bien la UNE ganó municipios en 2019, Giammattei fue el ganador en términos generales.
Ahora bien, 2011, 2015 y 2019 cuentan con un factor en común: el abstencionismo, que ha estado presente en todas las contiendas y que principalmente en la segunda vuelta electoral incrementa. Por ejemplo, en Totonicapán el porcentaje de abstencionismo fue de 49% en 2011 (93,894 no acudieron a las urnas), el 51% (101,313 inasistentes) en 2015 y el 53% en 2019 (133,046 votantes que se abstuvieron).
En Retalhuleu, ocurrió algo similar a Totonicapán. Cada año electoral el abstencionismo fue aumentando. Por ejemplo, en 2011 el porcentaje fue de 42.5%, en 2015 creció a 44% y para las elecciones de 2019 hubo un 62% de abstencionismo. Ahora, en Suchitepéquez en la segunda vuelta de 2011 el 36% de los empadronados no fue a votar (96,521) y el mismo 36% tampoco participó en 2015. Para 2019, hubo un aumento significativo, con 54% de abstenciones.
Capítulo 3: Región Oriental
Lenad Gamboa / Izabal
Juan Diego Godoy / Ciudad de Guatemala
En la región oriental del país se han mantenido altos índices de participación en las urnas. Han sido 12 años en los que la segunda vuelta es ganada por el candidato más a la derecha del espectro ideológico y más conservador.
En el 2011, los departamentos de Chiquimula, Jalapa, El Progreso, Jutiapa y Santa Rosa, se inclinaron en favor de Otto Perez Molina (PP), dejando a Manuel Baldizón (Líder) como ganador en solo dos departamentos de la región.
Jalapa, el departamento del narcotraficante Mario Estrada, fue el departamento del oriente del país donde Otto Pérez Molina tuvo más simpatizantes, y todos los municipios menos uno votaron por él.
Manuel Baldizón obtuvo mayoría de votos en dos departamentos del oriente del país, en Santa Rosa y en Izabal.
En 2015, el triunfo de FCN Nación de Jimmy Morales fue abrumador, tanto a nivel nacional como en esta región. En los departamentos de oriente, Morales se hizo con 63 municipios, mientras que la UNE de Sandra Torres solo ganó en 14 municipios de la región de oriente.
A diferencia de 2015, en 2019 el balotaje se dio entre dos caras muy conocidas de la política nacional. Sandra Torres y la UNE llegan a su segunda contienda consecutiva y Alejandro Giammattei con el partido Vamos, que había corrido en las tres elecciones anteriores con el partido Fuerza, y los desaparecidos GANA y CASA.
Si bien Sandra Torres, obtuvo un incremento de votos en diferentes municipios de los departamentos del oriente como en Izabal (Los Amates, El Estor y Livingston), Chiquimula (Jocotán, Camotán, Esquipulas, Olopa, San Jacinto y Ipala) y Jalapa (Mataquescuintla, San Carlos Alzatate, San Pedro Pinula, y San Manuel Chaparrón), los votos no fueron suficientes. Giammattei ganó a nivel nacional y en esta región también superó a la UNE con el voto de 33 municipios de los departamentos mencionados.
Todos los municipios de El Progreso votaron por Jimmy Morales en 2015, pero en 2019 varios optaron por Sandra Torres.
El departamento de Santa Rosa fue uno de esos que en las elecciones generales de 2015 votó casi de forma masiva por Jimmy Morales, con solo un municipio a favor de Sandra Torres y que sin embargo, en las elecciones de 2019, un gran número de municipios se voltearon y votaron por la candidata de la UNE. En Izabal, el apoyo a Sandra Torres también incrementó en 2019.
Los municipios y departamentos de Guatemala, como han mostrado estos mapas, no tienen en términos generales, una tendencia ideológica estable, si bien tampoco lo tienen los partidos que concurren a las elecciones. Pero si puede verse una tendencia, mientras el voto por Jimmy Morales, el outsider, fue avasallador en gran parte de municipios en 2015, Sandra Torres fue ganando terreno a favor de la UNE en 2019, quitándole votos a Alejandro Giammattei. Solo las grandes ciudades y los departamentos más centrales del país han emitido un claro voto rechazo a la candidata de la UNE. Está por ver qué sucederá el próximo 20 de agosto. #Elecciones 2023.
La Urna Departamental es un proyecto periodístico de No Ficción. Tres jóvenes periodistas cuentan desde Quetzaltenango, Totonicapán e Izabal historias sobre las Elecciones Generales 2023. Lee toda nuestra cobertura electoral en La Urna.
