Las autoridades británicas indicaron que, además de presentar una mayor contagiosidad, la cepa que ya es predominante en el país también podría ser hasta un 30% más letal. Aclararon también que hay “evidencia creciente” de que las vacunas también son efectivas contra ella
El primer ministro británico, Boris Johnson, dijo este viernes que hay indicios de que la variante del COVID-19 descubierta en el país podría ser hasta un 30 por ciento más letal que la original.
En una conferencia de prensa, el director médico de Inglaterra, Chris Witty, dio un ejemplo para ilustrar el anuncio: “Para personas de 60 años, de cada 1.000 personas que se contagian el riesgo promedio es que aproximadamente 10 pierdan la vida. Con este nuevo virus, se espera que la cifra esté entre 13 y 14″.
Witty indicó a su vez que las estadísticas son similares para los diferentes grupos demográficos. Hasta ahora, las autoridades habían confirmado que la nueva cepa era más contagiosa, entre un 30 y 70 por ciento más que la original. Y si bien remarcaron que las nuevas estadísticas no son concluyentes, sí “parece haber un incremento en la mortalidad además de la transmisibilidad”.
No obstante, Vallance fue menos optimista con respecto a aquellas detectadas en Sudáfrica y Brasil. Dijo que “hay preocupación sobre ciertas características que las hagan menos susceptibles” y que si bien es necesario obtener más información para comprender sus efectos, son “más preocupantes” que la variante británica.
Detalló a su vez que la última información disponible sugiere que 44 personas en el país (que podrían ser hasta 71) han sido diagnosticadas con la variante sudafricana, pero no hay evidencia de que esta o la brasileña se transmitan con mayor velcidad y puedan pasar a convertirse en la dominante en el país.
También dijeron que las muertes diarias continuarán en ascenso y descenderá después de que lo hagan los casos. El Reino Unido reportó el 20 de enero un récord absoluto en esta categoría: 1.820. Las cifras han ascendido sostenidamente desde octubre, cuando la nueva cepa comenzó a circular de manera extendida en el país.
Habiendo impuesto severas restricciones sanitarias, las autoridades han depositado buena parte de sus expectativas en la campaña nacional de vacunación para la que han montado numerosos centros que operan las 24 horas del día y los siete días de la semana. Según las últimas estadísticas, ya han sido administradas 5,4 millones de dosis, lo que representa un 8,1 por ciento de la población.